Corazones latiendo

miércoles, 26 de diciembre de 2012

Date cuenta.

¿Por qué no te das cuenta de qué me duele estas peleas estúpidas contigo?
¿Por qué no te das cuenta de no eres el único que ha sufrido por amor?
¿Por qué no te das cuenta de qué te quiero más qué a nadie?
¿Por qué no te das cuenta de qué tanto como tú quiero dejar de pelearme?
¿Por qué no te das cuenta de qué sufro?
¿Por qué no te das cuenta de qué tengo miedo, temor, de enamorarme de nuevo?
¿Por qué no te das cuenta de qué te escribo, para qué me escuches?
¿Por qué no te das cuenta de todas estas cosas?

jueves, 13 de diciembre de 2012

Esos momentos.

Sea el lugar que sea, cualquier estación, cualquier año, cualquier momento, siempre habrá algo que te haga dudar de todo lo que has vivido.
Por mucho que haya deseado ser una princesa a la cual rescatan de un castillo por una bruja mala, o por su malvada madrastra, todos crecemos, maduramos, y lo peor es que nos damos cuenta de que nada de eso puede ocurrir. ¿Pero y si es cierto? ¿Y sí siempre hay una persona dispuesta de salvarnos de todo?
Salvarnos de un día triste, salvarnos de un mal momento, salvarnos de un mar de lágrimas a solas, salvarnos del mundo entero. En vez de regalarnos joyas, flores, dinero; nos regalan momentos de felicidad, momentos de amor, de cariño, de sinceridad, de ternura. Momentos que valen.

Momentos que no regalaríamos por nada del mundo, ni por tantos millones, no hay nada más sincero que dos personas se amen.


jueves, 6 de diciembre de 2012

Sin embargo es igual.


Todo cambia, los días pasan, los semestres vuelan y las personas cambian. Las amistades aguantan y el amor se gasta, las personas se van, nos dejan, y nos terminan dejando sus recuerdos.
Los recuerdos se quedan, las palabras se olvidan, el año se está terminando y un nuevo año se está asomando; pero sin embargo todo es como siempre.
Porque aunque sean etapas diferentes, diferentes sitios, con diferentes personas, todo es como antes, pero diferente.
Aunque los años terminen, las personas entren y salgan de tu vida, todo siempre será lo mismo.


Esa sensación de pesadez. La sensación de que aunque las cosas cambien, seguirá siendo igual que siempre.